Este panorama se desprende de un informe sobre el Estado de la Educación en Paraguay 2011, presentado ayer por el Consejo Nacional de Educación y Cultura (Conec).
"Hay nuevos desafíos para los que no fueron preparados y que no son sólo académicos", afirmó la consejera Aída Torres, al presentar el análisis de la situación de los educadores.
Según sus explicaciones, estos factores influyen en la calidad educativa y se refieren a las nuevas exigencias que recaen en el docente como el bilingüismo, las innovaciones científicas, el manejo de la tecnología y los procesos de competencias académicas.
Sostuvo que ahora se le pide al maestro que forme en ciudadanía, en habilidades de pensamiento crítico, en el desarrollo de conocimientos, y que además realice la contención sicológica de los alumnos.
Explicó que existe un nuevo perfil del profesional de la educación y que los maestros deben ser formados en estas capacidades, pero desde la perspectiva de las necesidades de los educandos, con un acompañamiento más acorde del sistema central de la educación y basado en políticas públicas.
DEGRADACIÓN. La consejera del Conec indicó que varias circunstancias marcaron la precarización de la educación. Una de las causas se refiere a la demanda de docentes que produjo la reforma educativa, lo que llevó a una explosión de demanda de formación docente en la década del 90. Dijo que en cinco años esa demanda de alumnos se elevó en un 427%, que recayó sobre los institutos privados.
Las innovaciones curriculares del nivel también tuvieron su impacto. Según la consejera María Teresa Ferreira, la propuesta del año 73 restó autonomía pedagógica, convirtiendo al docente en un transmisor de contenidos y estrategias metodológicas marcadas como obligatorias y que la reforma del 90 mejoró los salarios, pero no la capacitación ni la autoestima profesional.
Para revertir la escasa preparación de los docentes, la consejera indicó que se debe evitar la mercantilización en la formación de los futuros maestros, la politización en el acceso a los cargos, que no asegura que el profesional sea competente, y el establecimiento de políticas de regulación y monitoreo de evaluación de los institutos de formación docente.
EDUCACIÓN BÁSICA. El consejero Ramiro Domínguez presentó la situación del nivel de escolar básica, donde encuentra el factor económico como otra causa de falta de calidad e incluso del abandono escolar.
"Somos una sociedad económicamente pobre, donde un 40% de los alumnos pertenecen a familias de bajos recursos, una de las causas del desgranamiento escolar", dijo.
Añadió que se debe encarar una educación diferenciada, ya que hasta ahora el currículum es único y no considera a las zonas rurales ni al área de los guaranihablantes. "Somos un país bilingüe, pero no hay política desde el Ministerio de Educación en el área de guaraní, ni los docentes están formados en educación bilingüe".
También criticó el proyecto Escuela Viva, indicando que se mantuvo como un proyecto de laboratorio y dijo que no se logró articular el compromiso de la familia con el Estado y la sociedad. Añadió que el trabajo del docente sigue como una responsabilidad individual.
UNA LEY PARA LA EDUCACIÓN SUPERIOR
El padre Jesús Montero, secretario ejecutivo del Conec, refirió la necesidad de aprobar una ley consensuada para el nivel de la educación superior. Indicó que el proyecto que obra en Diputados es limitado, ya que trata solamente de las universidades y de institutos superiores que tienen rango universitario. "El ordenamiento no toca todos los institutos técnicos profesionales ni de formación docente", dijo.
"La educación superior necesita ser innovada; hay que aportar novedades al campo de la educación superior, incorporar la ciencia, tecnología, la extensión y la responsabilidad social empresarial", afirmó.
La Cifra
56%
de 18.800 cargos docentes concursados fueron cubiertos en el proceso de selección de este año.
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